Los sistemas de información geográfica aplicada a la gestión policial y prevención del delito

Resumen: En el presente trabajo intentaré plantear algunas observaciones sobre el accionar de las Fuerzas de Seguridad con respecto a la aplicación del Sistema de Información Geográfica, en el desarrollo de política Prevención del Delito. Todo ello se orienta desde una perspectiva, no meramente tecnológico sino de utilidad policial. Para poder cumplir dicho objetivo, en un primer lugar, tratare de reseñar a grandes rasgos como se dió la aplicación de los SIG dentro la institución policial. En un segundo lugar, como se dieron las reformas policiales, y para finalizar la utilidad de este sistema en la toma de decisiones en la gestión.

La prevención del delito y gestión policial aplicando los sistemas de información geográfica

Los delitos son fenómenos humanos y consecuentemente su distribución a lo largo del territorio no es geográficamente aleatoria. Para que sucedan delitos, los delincuentes y sus objetivos, tanto las victimas como las propiedades, deben coincidir en un periodo de tiempo y en la misma localización. Asimismo la información geográfica combinada con las bases de datos de los hechos delictivos permite realizar diversos análisis espaciales y crear mapas de criminalidad que sirven y orientan en el planteo de soluciones. Se puede agregar también el uso de mapas que permiten a las personas visualizar los aspectos y fenómenos geográficos del delito, no quedaría solo limitado a las fuerzas de seguridad y a los integrantes de la justicia, sino que también se extiende a organismos oficiales, los cuales se encuentran directa e indirectamente relacionadas con la seguridad ciudadana.
Ahora bien, con el objeto de ampliar los conocimientos básicos sobre los Sistemas de Información geográfica, se puede agregar que son los que permiten trabajar con información geográfica referenciada, manejando capas vectoriales, raster, es decir información procedente de bases de datos. Consecutivamente, en un SIG (acrónimo de Sistema de Información Georreferenciada) se usan herramientas de gran capacidad de procesamiento gráfico y alfanumérico, estas herramientas a su vez, van dotadas de procedimientos y aplicaciones para la captura, almacenamiento, análisis y visualización de la información. Su mayor utilidad se ve reflejada con su capacidad de construir modelos o representaciones del mundo real a partir de las bases de datos digitales, los cuales se logran mediante una serie de procedimiento específicos que pueden llegar a generar aún mas información para el análisis delictual policial.
Seguidamente, con respecto al mapeo criminal, estos implicarían un adelanto especializado en lo que hace a la actuación policial geopreventiva, como también pueden presentar una herramienta principal de gestión sustentada en los principios de una buena administración y, particularmente de la transparencia y la participación, tal como sostiene Lorenzo Segato:

“El delito tiene una cualidad geográfica inherente. Para que tenga un lugar un delito deben coincidir un delincuente y un objetivo apropiado en una localización concreta. Comprender el rol que esta localización tiene y la importancia de otros factores geográficos que dan lugar a que un delito suceda (por ejemplo las características del vecindario del que procede el delincuente) pueden proporcionar unos indicios de vital importancia que contribuyan a mejorar nuestra respuesta ante los problemas que conlleva el delito y cómo podemos capturar a los delincuentes.” (Segato, 2003 pag.147).

Al mismo tiempo, en relación a la presión del surgimiento de datos, el proceso de cartografiar delitos sufre distorsiones particulares amén de posibles errores mecánicos o humanos. (Fraile y Bonastra, 2010). Ambos autores se han encargado de examinar páginas web apoyadas directamente en datos policiales, motivo por lo cual ambos sostienen que no se puede conocer las cifras reales de delitos cometidos porque no todos los casos se denuncian, no todos los hechos denunciados son delitos, algunos delitos se persiguen más que otros, y otros son mucho más interesantes para las fuerzas del orden pues de oficio persiguen delitos como ser el tráfico de drogas, de los cuales no siempre se dispone de información cartografiable. Pero además los autores abocados a estos temas manifiestan también que una última distorsión está originada por la designación de los delitos que se muestran. Los mapas, esquematizando la realidad deberían facilitar su comprensión, pero en el caso que me ocupa, se puede visibilizar que la elección de los delitos que se cartografían no se puede imaginar ingenuos. Por otro lado, queda claro que no se pueden representar todas las infracciones tipificadas en el código penal, puesto que esto restaría legibilidad, y a grandes rasgos, en este tipo de mapas solamente se muestran aquellos delitos que producen más alarma social, como asesinatos, robos en viviendas, incendios provocados etc. Todo ello parece solo provocar ruido al ya de por sí distorsionado horizonte que se está observando. Y más aún cuando estos delitos no están definidos por parte del analista del delito, lo que hace que cada usuario los interprete a su manera ya que, en muchos casos, bajo una denominación genérica se agrupa una serie de delitos que guardan una cierta relación entre sí. Como mencioné anteriormente, un mapa es un sistema simbólico en el que la realización de los eventos se hace de manera arbitraria, aunque con el tiempo se hayan convertido en conformidades. Por otro lado se puede resaltar, su representación de la realidad, el cual otorga un punto de vista resumido de la misma y si sumamos a este hecho la utilización de imágenes uno se puede dar cuenta de que la distorsión de la realidad se vuelve aún superior de acuerdo a los diferentes autores y trabajos revisados para este escrito. Al mismo tiempo, me parece de suma importancia no dejar de lado el impacto que estos mapas pueden tener en la percepción de seguridad del vecino que los consulta y de la influencia que esto ejerce sobre su comportamiento espacial. A continuación me enfocare brevemente hacia una mirada del profesionalismo policial.

Hacia un nuevo profesionalismo policial

En los años 80, comienza en América latina un proceso de democratización en las agendas de reforma policial, las cuales buscaban desarrollarse sobre diversos ejes, como ser en un primer lugar, el respeto por los Derechos Humanos, en un segundo lugar, buscar un control externo de las fuerzas policiales, y en un tercer lugar, que la institución policial se convierta en un policiamiento comunitario, tratando así de obtener transparencia en el accionar de la misma. De igual modo, estas modernizaciones institucionales vendrían dadas para una mejora en la formación, en equipamientos y tecnología, buscando así un tratamiento de las informaciones criminales sustentadas (mediante técnicas de geográficas). A su vez, la relación entre policía y comunidad no parece ser ni más ni menos que un punto de partida y el punto de una reflexión en torno a los nuevos paradigmas de la función policial y de la modernización de la organización policial en nuestra sociedad. En la práctica, la preocupación se ha centrado en la introducción o construcción de nuevas estrategias interactivas entre la policía y la comunidad organizada para enfrentar la prevención del delito, la violencia y la inseguridad. Por su parte las instituciones policiales no se desarrollan a la margen del escenario de los diferentes cambios que envuelven a nuestra sociedad, motivo por lo cual también sus policías constantemente intentan adaptarse a esa demandas.
Ahora bien, con respecto a temas de reformas policiales en Argentina, se puede demarcar el pensamiento de Marcelo Saín, con miras a estas reformas policiales, el mismo sostiene que es la acción del Estado la destinada a prevenir un delito. El Estado y su entorno institucional forman parte de una red de control social, en la que se establecen normas y conductas, y maneras de intervención para garantizar su cumplimiento, estos mecanismos constituyen una red legal e institucional a la que se denomina en un sentido general, sistema penal. En su contexto se lleva adelante el proceso de criminalización mediante el cual se selecciona un grupo reducido de personas a las que el Estado les impone coactivamente una pena por considerarlas responsables de la comisión de ilícitos. Dicho proceso se da en dos etapas: primaria (a través del parlamento y del ejecutivo) en la que se establecen por ley diferentes acciones prohibidas, y secundaria (llevada adelante por la agencia judicial, la policía, y la agencia penitenciaria) en la cual se incrimina y se lleva adelante una acción punitiva, ambos casos definidas en el programa legal previo. La criminalización primaria configura un marco de acción institucional para abordar una determinada realidad. Es un proceso selectivo de carácter meramente conceptual, que no llega a abordar el casi infinito conjunto de relaciones sociales, de situaciones que se puedan llegar a dar ya que las agencias encargadas de la criminalización secundaria no poseen la capacidad institucional. (Saín, 2002, pág. 21).

El SIG como herramienta de apoyo en la toma de decisiones policiales

Como afirmo en los párrafos anteriores, y en consonancia con los trabajos de los autores chilenos Tudela Poblete, se puede objetar que la difusión del uso de una nueva tecnología va a depender del grado en el cual ésta se ve como un desarrollo equilibrado. Es probable que varios factores se tengan en cuenta al momento de establecer el conocimiento de la tecnología SIG. Sin ahondar profundo describiré algunos factores que, a mi entender, son pertinentes en este contexto. En un primer lugar podemos resaltar, el grado con que las funcionalidades ofrecidas por el SIG corresponden al tipo de operaciones que se le exigen. Por otro lado, se puede considerar que no se debería colocar el software de SIG en la misma categoría de, por ejemplo, software procesador de palabras. Seguidamente, los diferentes tipos de aplicaciones de estos Sistemas de Información Geográfica requieren utilidades altamente específicas que no pueden ser cubiertas a través de un solo paquete de software. Ahora bien, un segundo factor sería el cual corresponde a determinar hasta qué punto el software es fácil de usar, por ejemplo, a través de una interface entre el usuario y el software. Un tercer factor sería el encargado de revisar las inversiones necesarias que se deben ejecutar en software y hardware. Un cuarto factor, de acuerdo a la mayoría de los autores que se encargaron de trabajar sobre este sistema de información, sería el problema de obtención datos. Resumiendo estos factores, parece claro que los SIG no son todavía una tecnología madura esto explicaría porque la difusión de tecnología de los SIG se encuentra algo fragmentado. En consecuencia, se podría acotar que es probable esperar diferencias en el grado de aplicación con respecto a la prevención policial, incluso dentro de la misma institución. (Poblete y Tudela, 2005 pag.28)

La distribución del personal policial en el territorio desde la perspectiva SIG

En este argumento, y siguiendo el plan de vigilancia de cuadrantes utilizado por la Policía de Carabineros de Chile, el cual fue utilizado por esa institución, con la finalidad de buscar el acercamiento del ciudadano (proximidad) del agente policial, como intercambio de información útil para el desarrollo policial como así también, con el objetivo de contribuir a una mejora y calidad de vida de la población, como la fortaleza en lo que respecta a la seguridad. Asimismo se puede visibilizar lo relevante y novedoso de dicha estrategia, ya que la misma presenta una mirada de forma directa en el desarrollo de gestión policial. Consecuentemente es de suma importancia destacar los ejes de determinación de vigilancia aplicado en el vecino país, en el cual se ve centrado la esencia del bien o mal funcionamiento de dicho plan más allá de los recursos con los cuales cuenta dicha institución policial. Al mismo tiempo, Carabineros, con el propósito de estimular correctamente los niveles de vigilancia desarrolló una metodología de cálculo denominado UVE (unidad de medida que expresa la cantidad de vigilancia policial). De esa manera, por medio de esa medición pudieron hacer cuantificable el verdadero aporte de cada una de las modalidades de vigilancia (patrullaje, recorridas etc.) y así poder realizar la prevención territorial como poder determinar sus costos. Me parece necesario resaltar, seguidamente la importancia del Sistema de Información Geográfico, para Carabineros ya que le ha contribuido de manera significativa para identificar áreas, problemas de seguridad urbana. Pero más allá, de la localización de los puntos y áreas de ocurrencia, el Sistema de Información Geográfico mediante su utilidad le sirvió también para poder realizar el monitoreo de la criminalidad como de la actuación policial.
En cuanto a la importancia de este sistema de información también se puede enfatizar lo vertido por el autor Lorenzo Segato, quien sostiene que la relación entre delito y espacio se puede conocer y gestionar más fácil y rápidamente a través de los mapas de localización geográfica. Estos mapas contienen información espacial sobre los hechos que acontecen el espacio físico y tienen, por tanto coordenadas geográficas, lo que significaría que el componente geográfico, es el elemento clave de los mimos. Si se olvida este elemento clave se desvirtúa esta herramienta, motivo por lo cual se puede concluir que los mapas del delito, no debería ser de suma importancia y coloridos solo para los medios de comunicación, ya que el objetivo de estos mapeos es la de reflejar visualmente datos, asimismo son los que ofrecen de forma inmediata sobre donde ocurrió un evento en una zona concreta. (Segato, 2003).
 

Conclusiones

Con este trabajo puedo afirmar que he llegado a la conclusión que las Instituciones policiales se van perfeccionando con el correr del tiempo a la par de las nuevas tecnologías. Igualmente podría admitir que en los tiempos pasados, cuando dichas fuerzas no contaban con estos dispositivos, sus actividades eran mucho más difíciles a la hora de combatir la criminalidad y la delincuencia.
Por otro lado, se debe agregar que en estos tiempos se han implementado una gran cantidad de dispositivos que garantizan la seguridad pública. De igual modo, todo indica que las fuerzas de seguridad se encuentran enfocadas en el proteger y vigilar para evitar lo delictual. Simultáneamente, con la tecnología se ha realizado una búsqueda constante de nuevos métodos y nuevos dispositivos que garanticen que el crimen se combata con mayor eficacia y rapidez.
Indiscutiblemente, y como se pude observar en el trabajo de Carabineros, el sistema de información geográfica puede aportar mayor virtud para el análisis en la medida que el tipo de información, así como su validez y confiabilidad, sean óptimos. (Tudela Poblete, 2003).
Igualmente, los sistemas de Información geográfico desde el enfoque de gestión puedo decir que brinda una colaboración superadora en controlar las carencias que limitan las eficacias de las estrategias relacionadas a la prevención delictual.
Finalmente, queda visibilizado también, que es necesario la confección de un mapa delictual, ya que es la herramienta por la cual la institución policial, puede ver el desarrollo de cualquier evento, como así también, para prever o pronosticar su evolución.
 
(*) Licenciado en Seguridad Ciudadana por el Instituto Universitario de la Policía Federal Argentina, Candidato a Magister en la Maestría en Sociología de la Cultura y el Análisis Cultural, UNSAM IDAES-CONICET. [email protected]
 

Bibliografía

  Varona Martinez, G. (2012). Análisis Espacial De Datos Georreferenciables de interés criminológico..  Euskadi: Universidad del País Vasco.

  Fraile P. & Bonantra Q. (2010). Seguridad y mapas online del delito: la otra cara de la participación ciudadana. Scripta Nova. Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales. [En línea]. Barcelona: Universidad de Barcelona, 1 de agosto de 2010, vol. XIV, nº 331 (12).

 

  Tudela Poblete, P. (2003). Experiencia de Chile en el empleo de tecnología SIG, en los procesos de mejoramiento de la gestión policial y la implementación y evaluación de programas de prevención social y situacional del crimen y la violencia. Departamentos de información y Estudios, división de Seguridad Ciudadana, Ministerio del Interior de Chile.

 

  Herrera A.Y Tudela Poblete P.  (2005). Modernización Policial: La relación de la Policía con la Comunidad como Campo de Gestión y referente de Cambio en la Policía de Investigaciones. Chile: ASDI

 

  Saín, M. (2002).  Seguridad, democracia y reforma del sistema policial en la argentina;  Buenos Aires: Ed. Fondo de Cultura Económica

 

  Segato, L. (2003). Los Mapas de la Criminalidad. Director del Centro de Investigación y Estudios de Seguridad y Delincuencia. Buenos Aires:  Editorial Padua.

 

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